Reconocer y Responder al Abuso Sexual entre Hermanos

Boletín SAARA nº 7

Tanya Rouleau Whitworth, Corinna Jenkins Tucker, Lizzie Martell, y David Finkelhor
Verano 2024

El objetivo de este boletín es definir el abuso sexual entre hermanos y ofrecer orientación a padres y profesionales sobre cómo responder. Nuestra definición del abuso sexual entre hermanos incluye los comportamientos que se llevan a cabo, la motivación del niño que causó el daño y el impacto (o el posible impacto futuro) en el niño que sufrió el daño.

Según los cálculos actuales, entre el 2 % y el 5 % de los niños y adolescentes sufren abuso sexual por parte de un hermano. El abuso sexual entre hermanos suele comenzar antes y durar más que otros tipos de abuso sexual infantil; la edad promedio del niño agredido al comenzar el abuso es de 8 años. Es importante destacar que los estudios de investigación muestran que el impacto del abuso sexual entre hermanos en la salud mental y el funcionamiento interpersonal puede ser tan grave como el abuso sexual por parte de un adulto que ejerce el cuidado del niño.

Definición de Abuso Sexual entre Hermanos

No existe una regla simple para determinar si el comportamiento sexual entre hermanos es abusivo. Algunas definiciones del abuso sexual entre hermanos, en particular las definiciones legales, establecen una diferencia de edad de más de 4 o 5 años. Sin embargo, los estudios realizados con personas que han sufrido este tipo de abuso muestran que el comportamiento sexual entre hermanos puede considerarse abusivo incluso cuando la diferencia de edad entre ellos es mucho menor. El género es sin duda un factor importante —el escenario más común es el de un hermano mayor y una hermana menor—, pero el abuso sexual entre hermanos puede darse en cualquier combinación de géneros.

Peter Yates y Stuart Allardyce, expertos reconocidos en este campo, propone una escala continua de comportamiento sexual entre hermanos con cuatro niveles: (1) apropiado para el desarrollo, (2) inapropiado, (3) problemático y (4) abusivo. Dicha escala es una herramienta útil para conceptualizar el comportamiento del niño que ha causado daño; sin embargo, la etiqueta asignada puede no corresponder con la gravedad del trauma sufrido por el niño perjudicado.

A partir de esta escala y del extenso trabajo de John Caffaro en este campo, hemos elaborado la siguiente lista de características que pueden ser signos de abuso sexual entre hermanos. Cualquiera de estos signos es motivo de preocupación:

  • Comportamientos sexuales que implican contacto físico, como manoseos, contacto oral-genital o relaciones sexuales
  • Comportamientos sin contacto que no son apropiados para la edad, como la producción y el intercambio de imágenes sexuales o espiar a un hermano mientras está desnudo
  • Comportamiento sexual en el contexto de una diferencia de poder basada en la edad, el género, la capacidad cognitiva o física, la competencia social, el papel que se desarrolla dentro de la familia (por ejemplo, un hermano que cuida al otro) o el favoritismo de los padres
  • Comportamientos sexuales que implican el uso de la agresión, la fuerza, la coerción, el engaño, el soborno o la manipulación
  • Comportamientos sexuales motivados por la intención de hacer daño, dominar o humillar, o por la compulsión o la presión de otros
  • Sentimientos de vergüenza, miedo, ira o ansiedad en el niño, o la manifestación de otros signos de trauma tras una interacción sexual

Los expertos afirman que, ocasionalmente, los hermanos participan en lo que podría considerarse una exploración sexual apropiada para su desarrollo. En este caso, todos los siguientes indicio:

  • Ocurre de forma ocasional y durante un breve periodo de tiempo (frecuencia confirmada, no supuesta)
  • Ocurre entre niños con niveles de desarrollo similares
  • Está motivado por una curiosidad acorde con la edad de los niños
  • Es en tono de juego (sin coerción ni engaño)
  • Solo se produce una leve vergüenza si se descubre
  • Los niños son fácilmente redirigidos por los padres o quien los cuida

Incluso cuando el comportamiento sexual entre hermanos cumple estos criterios, los adultos responsables deben redirigir a los niños y aprovechar la situación para enseñarles sobre los límites corporales sanos y seguros. Cualquier comportamiento sexual entre hermanos que no cumpla con esta descripción merece una investigación meticulosa por parte de un profesional calificado. Las familias y los niños pueden buscar ayuda de un pediatra, un profesional en salud mental, la enfermera de la escuela o el centro local de recursos para familias.

El abuso sexual entre hermanos debe tomarse tan en serio como cualquier otra forma de abuso sexual infantil. Los profesionales que se encargan de casos de conducta sexual entre hermanos pueden encontrar útil su entrenamiento en abuso sexual y maltrato infantil; sin embargo, hay que tener en cuenta que existen dinámicas únicas en las relaciones entre hermanos que es importante considerar, como el orden de nacimiento, el hogar que comparten y los roles familiares de los niños. El campo de la intervención en casos de abuso sexual entre hermanos está evolucionando y debe incluirse de manera sistemática en la educación para el desarrollo profesional en diversos campos.

Detección y Reacción ante el Abuso Sexual entre Hermanos

Los estudios demuestran que es poco probable que los niños hablen con alguien sobre el abuso sexual entre hermanos. A menudo, los niños guardan el secreto porque se sienten cómplices y confundidos acerca de sus experiencias. A veces, el comportamiento sexual entre hermanos comienza como algo exploratorio y mutuo, pero se convierte en coercitivo cuando uno de los niños quiere detenerlo. Otras veces, los hermanos se involucran sexualmente para satisfacer necesidades de afecto que no satisfacen los encargados de su cuidado. Incluso en casos de clara coerción o fuerza, el niño perjudicado a menudo se culpa a sí mismo y piensa equivocadamente que podría haberlo impedido de alguna manera.

Algunos padres que se dan cuenta del comportamiento sexual entre hermanos pueden restarle importancia y considerarlo como «curiosidad normal» e inofensivo. Otros padres pueden entrar en pánico y pensar lo peor. Pueden castigar y avergonzar a los niños. Ninguna de estas reacciones es beneficial para los niños. Es importante creerles a los niños que dicen haber sido agredidos por un hermano y buscar ayuda profesional si hay indicios de abuso. Aprender a identificar las dinámicas dañinas entre hermanos y los signos de abuso sexual infantil contribuirá a una intervención temprana en los traumas sexuales entre hermanos y el secretismo y la vergüenza asociados a ellos.

Cuando ocurre abuso sexual infantil, es necesario adoptar una respuesta integral, centrada en el niño y que involucre a toda la familia. Puede ser necesario abordar las dinámicas familiares disfuncionales y los estilos de crianza, y proporcionar educación psicológica a todos los miembros de la familia sobre las relaciones saludables y la sexualidad. Se debe evaluar y tratar al niño afectado por los síntomas de trauma y los conceptos equivocados sobre el comportamiento sexual o la culpabilidad. Las intervenciones con el niño que causó el daño deben basarse en trauma y enfocarse en sus virtudes. La mayoría de los niños y adolescentes que muestran conductas sexuales dañinas no se convertirán en agresores sexuales adultos; el tratamiento basado en la evidencia puede ayudar a lograrlo.

Para Más Información:

Bertele, N., & Talmon, A. (2023). Abuso sexual entre hermanos: una revisión de los estudios empíricos en este campo. Trauma, Violence, & Abuse, 24(2), 420–428. https://doi.org/10/grw7r9
Caffaro, J. V. (2014). Trauma por abuso entre hermanos: estrategias de evaluación e intervención para niños, familias y adultos (2nd edición). Routledge.
Caffaro, J. (2021). Abuso sexual entre hermanos. En T. K. Shackelford (Ed.), The SAGE Handbook of Domestic Violence (pp. 758–778). SAGE Publications Ltd. https://doi.org/10.4135/9781529742343
McCoy, K., Sonnen, E., Mii, A. E., Huit, T. Z., Meidlinger, K., Coffey, H. M., May, G., Flood, M. F., & Hansen, D. J. (2022). Ayudar a las familias tras el abuso sexual entre hermanos: oportunidades para mejorar la investigación y las respuestas políticas abordando los retos prácticos. Aggression and Violent Behavior, 65, 101652. https://doi.org/10/gr2hnf
Rosenzweig, J. (2015). Guía para padres sobre cómo hablar de sexo: guía completa para criar hijos (sexualmente) seguros, inteligentes y sanos (Edición actualizada). Skyhorse.
Tener, D., & Silberstein, M. (2019). Intervenciones terapéuticas con niños sobrevivientes de abuso sexual entre hermanos: la perspectiva de los profesionales. Child Abuse & Neglect, 89, 192–202. https://doi.org/10/grw46x
Yates, P., & Allardyce, S. (2021). Abuso sexual entre hermanos: resumen de conocimientos y prácticas. Centro de especialización en abuso sexual infantil (CSA Centre). https://www.csacentre.org.uk/app/uploads/2023/09/Sibling-sexual-abuse-report.pdf
Yates, P., & Allardyce, S. (2023). Comportamiento sexual entre hermanos: guía para responder a comportamientos inapropiados, problemáticos y abusivos. Centro de especialización en abuso sexual infantil (CSA Centre). https://www.csacentre.org.uk/app/uploads/2023/09/Sibling-sexual-behaviour-English.pdf